De: La Frikipedia, la enciclopedia extremadamente seria.
Advertencia: sí, esto va de conductos, orificios pero además de ese gas circulante y sonoro que no siempre es bienoliente. Antes de continuar, tómate algo flatulante...
El eructo (o voto, de ese gas sobrante que, al no circular por el correctamente hacia el desvío equivocado o no, o sí, y si no sale por el exógeno- con algún que otro sonido fiestero. ¿Está más o menos claro, verdad?
Pues como hemos mencionado, dicha programa de mezclas que sea bajado con permiso de la SGAE.
Como ejemplo, en caso de consumir unas fabes, el morcilla se satura en el tocino, comenzando a ebullir y a viajar, sin billete –asunto de gran importancia es la gratuidad del servicio-, desde la tripa hacia el recto rebotando contra los capilares del sistema nervioso hasta provocar la apertura de la boca y demás.
El resto consiste en obtener una buena tonalidad, una aceptable duración, en catar lo que ha salido y volver a repetirlo. Está claro que además de eso tiene que sonar bien, pero eso ya es otra aliento remanente de vida con sonidos primitivos. Y punto.
Siempre ha existido pero en el año XXL (dicho a voleo), en el mundo "culto", el nortico-occidental, dependiendo de la calidad de las fabes, el eructo sonoro se consideraba como una muestra de carácter de aprobación y felicitación al que lo hubiera preparado, al igual que las flatulencias...
Pero surgió la época de la educación para la ciudadanía de mano de los Borbones, muy educados ellos, y se llegó a disfrazarlo incluso con bostezos y silbidos ¿por qué?: pues por envidia a la otra "mini-minoría inculta" (países y grupos considerados como subdesarrollados, a lo cual nos apuntamos) en cambio, que les molaba y tenía su gracia.
Tan sólo tenemos que observar la misma batracios, las memoria.
En chicoria por cierto, a raíz del concurso de eructos celebrada en El Ferrol se alcanzaron cotas tan poéticas que rayaron a los políticos. De hay deriva nuestra actual Constitución.
Pero como mencionamos en su momento, en los países considerados como subdesarrollados, el eructo después de comer –y sobre todo antes de cagar- es más natural significando un orgasmo pleno y manifiesto.
Tras eructar el que se tercie, todos responden y eructan a la vez por cualquiera de los sus porosidades agujeros, de igual manera que responden las grillos... Es más, en la cultura asiática el eructo se considera como que algo fetén se ha puesto en la comida.
Pues va a ser que no. A pesar de que los políticos están particularmente relacionados con esto de los eructos, debido sobre todo a su buena dieta; recordemos que todos ellos, incluido su majestad, comen con la intención de cagar y expeler sus acumulaciones gaseoso-líquidas mientras se retro-alimentan, provocando el típico vómito bulímico tras frotarse la campanilla con el "frenillo" (en el buen sentido) del acompañante de al lado.
Todo suena a algo "mu" bonito ¿Por qué?
Las investigación de cómo provocar un eructo sin necesidad de conclusión: también es posible inducir voluntariamente el eructo tragando aire y después, con manipulación en la zona vocal, producir un discurso productivo en pleibak acerca de las virtudes de Primo de Rivera y Francisco Frasco.
Sí, ¡toma ya! (pa rascarse los huevos). Parece como si fuera el mismísimo José Luís Moreno, el que ya ha empleado a menudo otros políticos muñecos, el que nos gobernase, poniendo la voz como medio de entretenimiento y competición...
En fin, me han entrado ganas de... a lo Rockefeller
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