De: La Frikipedia, la enciclopedia extremadamente seria. De: La Frikipedia, la enciclopedia extremadamente seria.
| De la serie deportes para todos: | |||
| Rally | |||
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| Número de practicantes | Todos los finlandeses que tienen su apellido acabado en -nen (Hay excepciones) | ||
| ¿Deporte Olímpico? | sí, claro, desde Atenas 1896 ¬¬ | ||
| Campeonatos | WRC, IRC, el Dakar y un zillón de campeonatos más | ||
| ¿Donde se practica? | Por todo el planeta, pero si es en un lugar donde hay barro y nieve, y además barrancos y precipicios, mejor que mejor | ||
| ¿Control anti-dopping? | Ninguno, ni de alcoholemia, ni anti-doping, ni anti-droga; si quieren ir rápido y fostiarse, allá ellos, es su problema... | ||
| Riesgo de muerte | Altísimo, incluso de muerte en ocasiones | ||
| Árbitro | Hay comisarios de carrera, pero para qué, si hacen menos que los funcionarios | ||
| Hinchas | Los que se dedican a estorbar en medio de la carrera | ||
«¡¡¡Trata de arrancarlo!!! ¡¡¡Trata de arrancarlo, Carlos, trata de arrancarlo, TRATA DE ARRANCARLO, POR DIOS!!! (instantes después) ¡¡¡ME CAGO EN SU PUTA MADREEEEEEE!!!»
~ Luis Moya describiendo a Carlos Sainz lo que siente uno cuando se queda a ná y menos de la meta y que te quiten el mundial de rallies
«Ostias, una oveja»
~ Luis Moya cuando a casi 200 km/h su amigo del alma, presuntamente ebrio, atropella a una indefensa oveja que estaba parada en medio del camino del rally de Nueva Zelanda
«Esto ya no es un rally. Es una pura locura. Afortunadamente, la victoria está casi conseguida»
~ Henri Toivonen justo antes de la ES 18 (Corte-Taverna) del Rally de Córcega de 1986. Tramo en el que se mató junto a su copiloto, Sergio Cresto
«Vamos, vamos, ahora que hemos estado yendo a tope, es el momento de ir aún más deprisa...»
~ Henri Toivonen queriendo ir más deprisa incluso después de su desafortunada muerte
«Los pedales están para pisarlos a fondo. Si quitas el pie del acelerador es para apurar una frenada y si sueltas el pie del freno es para volver a dar gas al máximo»
~ Carlos Sainz borracho y haciéndose la picha un lío
«Ante la duda la más tetuda gas a fondo»
~ Bjorn Waaldegard , primer campeón del mundo de rallies explicado clara y concisamente la verdadera esencia de este deporte
«Si puedes ver, el arbol contra el que te vas a estrellar... es subviraje. Si lo oyes... es sobreviraje»
~ Walter Röhrl sobre cómo es un viraje antes de estrellarte
«Me voy a retirar el día que Dani Sordo me gane»
~ Sébastien Loeb sobre su retirada a largo plazo, ya que Sordo no gana ni a la de tres...
«Esa curva la toma más rápido hasta mi puta abuela»
~ El copiloto Michael Park incitando a Markko Martin que se la pegue de puta madre en un tramo del rally de Gales. Un copiloto de los que ya no quedan...
«E mentalizarze y quererzé de verdá, zano, eze cuerpo, tené potencia, se feli, quererte tú mismo a quererte tú mucho, porque quiere también al que tiene a tu lao y todo zale de verdá de deporte»
~ El Cordobés , padre antes de empezar un rally... No tiene ni puta idea de dónde coño se ha metío...
Los rallies, también denominados Ral·lis en los Paraïsos Catalans (no confundir con Wallies) es un deporte de estampar carreras de coches que por lo general consiste en recorrer varios tramos cronometrados de asfalto, grava, barro o nieve e incluso mierda de vaca (dependiendo del país donde se celebre el rally) en el menor tiempo posible y pegándose las menos ostias posibles para llegar de una sola pieza (y con el menor número de averías en el coche) a la meta del último tramo cronometrado. Su máximo exponente es el Mundial de Rallies (World Rally Championship), aunque tampoco hay que perder de vista al IRC (International Rally Challenge), al Dakar (aunque se celebre en Argentina), a los "Rally Race" de los X-Games, y por supuesto, a cualquier rally amateur que se realice por toda la geografía española, que esos son los más guapos y donde se meten más piñazos.
Un buen, emocionante, descacharrante, excitante y descojonante rally se caracteriza por:
Los rallys nacieron allá por schmarzo del año 1811 cuando un piloto de hípica robó un caballo y se fué recorriendo los caminos más difíciles de NeoTokio cuando derrapó, se salió de la pista y chocó contra un arbol, los habitantes, al ver esto no pudieron parar de reir y pensaron que sería mejor hacerlo con coches mas grandes, rápidos y destructibles, pero, ¿quién se pondría al volante de un coche que sería destruido sin remedio?, fácil, drojaban a los kamikazes de cada país y les contrataban.
Desde entonces se aprobó una ley para quitar todos los quitamiendos de las carreteras y venderlos como chatarra, para así cumplir la norma de la FIA de los rallies 382 (que obliga a que los coches se estampen de manera espectacular y de siniestro total).
Antiguamente, los rallys eran unas carreras con poca ruta especificada, con aún menos reglas, menos público en las cunetas y todavía menos seguridad y en donde los pilotos se daban de hostias por estorbarse entre si.
Su principal adaptación televisiva (y posterior inspiración para las generaciones futuras tanto en los bólidos como en los pilotos) fueron los Autos locos, donde Pierre Nodoyuna era la versión animada de Carlos Sainz pero lo bueno es que el de verdad era malo y no tenía suerte sin hacer trampas.
En esa época, los vehículos tenían tracción animal por delante (estirando) o por detrás (empujando) y para frenar fuerte lo mejor era meterle un bazookazo a, al menos, un animal de los 2, 4 ó 6 de los que estaban formados.
En los 80 (años 1880, cuando se hacía el turrón más caro del mundo), los fabricantes de carromatos (Udi, Flop, Rancia, Renol, Ostin y Pugeot, principalmente), como la FIA no impuso límites de potencia, se dedicaban a petar los coches con turbo, nitroso (nada más lejos en los años 80 se inventó el óxido nitroso) y revolucionando a tope el motor de los coches para aumentar al máximo la espectacularidad de los lechugazos y galletazos de los participantes reduciendo así la longitud de sus contratos y provocando muertes severas como la de Henri Toivonen en el 86. A partir de ahí los aguafiestas de la FIA, con su complejo de dictadores al frente (y eso que todavía Max "Nazi degenerado" Mosley no era presidente de la FIA), decidió poner punto y final al grupo B para reducir los ostiazos y las muertes en competición. Uno de los avances técnicos más destacados fue el use del derrape limpia-cunetas (usado por los abridores de pistas para hacer el tramo más seguro eliminando al público de sobras)
Los 90 puede que sea la época que ha dado a los pilotos más cazurros y posteriormente gafes de la historia, como Carlitos Sainz, Colin Mcrae o Richard Burns, jubilando a la anterior generación de los Kankkunen (aun así le dio tiempo a ganar dos mundiales más), Vatanen y compañía.
Hoy en día, los rallies consiste en ver a 80 coches inflaos a pegatinas en plan cazurro-fostiao (siendo un poco sinceros, la velocidad actual de los coches sigue siendo alta, pero es una mariconada comparado con los coches del Grupo B) donde dentro hay dos tíos con trajes también inflaos a pegatinas donde sólo puede ganar o Citroën o Ford, ya que no hay más marcas de las buenas, puesto que los coches valen sus pelas y no estamos para tirar la pasta con esto de la crisis. Y encima si marcas míticas como Subaru o Mitsubishi quieren dejar los rallies, aquí es cuando se debe decir que cualquier tiempo pasado fue mejor...
El Lancia Delta de Kankkunen
El Subaru Impreza con el qué ganó el tristemente fallecido Richard Burns su único mundial
El Citroen Xsara del imparable Sebastién Loeb
El mítico Lancer de Tommi Makinen
El Peugeot de los dos mundiales de Gronholm
El único cacharro con el que Carlos Sainz pudo ganar el Mundial
El Peugeot 205, gran dominador de las primeras ediciones del Mundial
El CLÁSICO...Sin comentarios...
Otro mito de los del Grupo B
De los pioneros en los rallies
Uno de los intentos de nuestra Seat para competir en los rallies
Renault antes de que se dedicase a la Fórmula 1
Como en todo buen deporte, los rallies tienen sus reglas:
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