De: La Frikipedia, la enciclopedia extremadamente seria. De: La Frikipedia, la enciclopedia extremadamente seria.
| De la serie monstruos mitológicos: | |||
| Dragón | |||
| |||
| Nombre Científico | Draconis Tremebundobulos | ||
| Hábitat | Cuevas, Castillos y debajo de las camas de pijos. Algunos especimenes rondan por el desierto del centro de Barcelona | ||
| Organización | Las orgias generalmente no superan los 20 | ||
| Actividad | ¿No acabo de mencionar las orgias? Vuelan debajo de puentes y violan canis (que quedan muy satisfechos) | ||
| Dieta | Emos no-suicidas (de ahí se come poco...) barbacoas y churros con chocolate en ferias y fiestas | ||
| Inteligencia | Aunque no esta comprobado, si de lo que se come se cria, su inteligencia debe parecerse a la de una de estas | ||
| Aparición | 1235 aC (antes de Camela, que todo hay que decirlo...) | ||
| Número aproximado | 37 - 3 + 15 x 36 | ||
| Armadura | Aunque su estructura es ancha y alta, está generalmente camuflada tras el traje y la corbata | ||
| Ataques | Echar fuego por la boca. Su Smash Final es igual que el de Samus XXX, quitarse el traje y la corbata (pero a lo bestia) | ||
| Moral | Generalmente baja, aunque tambien generalmente alta y generalmente media | ||
| Notas | Atacan a todo el mundo, se dejan atacar por solamente Goku | ||
Ser mitológico (como las esfinges, los zarigüeyas o los gamusinos (de estos ultimos en realidad existen algunos especimenes, como Bush) caracterizado por su capacidad para expulsar fuego por uno de los dos extremos de su cuerpo (generalmente el superior). Tienden a estar recubiertos de escamas y de una mala leche impresionante que suelen demostrar carbonizando a todo aquel que pillan por delante (o por detrás).
Su esperanza de vida media ronda entre los mil o tres mil años sin exagerar (exagerando, pueden llegar a los dos millones), y dedican toda su existencia a comer (generalmente aventureros despistados y virginales doncellas), acaparar una montaña de oro y joyas que utilizan para dormir (aunque algunos estudios apuntan a que utilizan todas esas riquezas para comprar tabaco y pelis pr0n) y ver la MTV y el Plus.
Los dragones suelen vivir en agujeros muy profundos llamados "cuevas" o más frecuentemente "guaridas de dragón". Dichos agujeros siguen el clásico esquema de todo antro cavernoso: interminables pasillos laberínticos con cuartos de baño a cada tres pasos o cuatro, pues los dragones no aguantan mucho más, gigantesca gruta central (utilizada generalmente para amontonar oro), mazmorras malolientes equipadas con consolas de ultimísima generacion, una cocina y cinco (y hasta seis) salas de relajacion y gimnasios para mantener en forma al dragón. Si usan o no estas ultimas salas, es asunto suyo.
A pesar del gigantesco tamaño de las guaridas, los dragones sólo se agrupan para suicidarse y para las orgias, pues prefieren la soledad el resto del tiempo, y viven solos.
En la actualidad los dragones se encuentran peligro de extinción debido principalmente a la proliferación de los billetes y las tarjetas de crédito, ya que estos materiales no les sirven para preparar sus lechos y por tanto mueren de insomnio. Algunos se aficionaron demasiado a las doncellas vírgenes, con lo cual, en vez de insomnio, mueren de hambre. Si en lugar de aficionarse a las doncellas se aficionan a los emos no-suicidas, tambien mueren de hambre por falta de presas.
El dragón es objeto de culto entre algunas especies, como los canis, quienes demuestran su veneración a través de tatuajes o estampados en los pantalones representando dragones. Se cree que es por la afición de ambos a almacenar oro, ergo los canis ven al dragón como un ejemplo a seguir.
No obstante, todo ese merchandaising es una medida desesperada para evitar la extinción, proporcionando material a los canis a cambio del oro que llevan (cuando se les acaba el crédito de la tarjeta y los leros). Se sabe que algunos dragones, en vez de seguir la tradición de "chamuscados primero, comidos despues", han optado por esclavizar a sus víctimas, encadenándolas a máquinas de coser al estilo de los talleres ilegales para fabricar dicho merchandaising.
Eso ha levantado ampollas (normal, es lo que tiene el fuego) entre los defensores de los derechos humanos. Claro que a los dragones eso les importa poco, ya que la presencia de esta gente les permite retomar el contacto con la tradición antes citada. Hasta el momento, la táctica les permite burlar el insomnio, aunque no tanto como desearían: al proporcionar material a los canis, éstos proliferan, y sus motos tuning hacen demasiado ruido como para conciliar el sueño, lo que les encabrona aún más.
En otra época los chamanes de los pueblos podían comunicarse de manera facil y segura, pero debido a el Gran Suicidio colectivo Chamánico ahora solo hay una manera.
Es un método complicado, inseguro y complicado. E inseguro. Para comunicarse rápidamente con los dragones creamos un vínculo psíquico con el dragón más cercano al practicante. El método en cuestión fue inventado por un química orgánica. El procedimiento es como sigue:
El método suele proporcionar resultados eficaces y una comunicación efectiva con el reino dracónico. El practicante del método podrá entonces comunicarse en lengua dragón con su interlocutor y podrá relacionarse con él de la manera que mejor le parezca, al igual que el mismo dragón invocado, que normalmente, dada la mala hostia que produce el insomnio a veces puede devorar la mente (de haber) al practicante del método sin mediar provocación causandole la muerte cerebral instantánea o dejandolo en estado vegetal para el resto de su vida.
El afamado Harry Petas tuvo contacto con dragones mediante este sistema, al que era muy aficionado. Claro que al dragón no le sentó particularmente bien, por lo que se dedicó a nublar con el humo de un farias la ya deteriorada mollera de Harry.
También se sospecha de la existencia de dragones buenos que conceden deseos, pero nadie ha conseguido acercarse lo suficiente a un dragón para preguntarle si era de los buenos o de los que comen gente, ya que los que lo intentan acaban comprobando que se estaban acercando a uno del segundo tipo.
Autor(es):
