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| De la serie ciudades del mundo: | |||||
| Tokyo | |||||
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| Topónimo oficial | 東京 | ||||
| País | Japón | ||||
| Código postal | a quién le importa | ||||
| Superficie | muy grande | ||||
| Altitud | la de Godzilla | ||||
| Distancia | ¿A dónde? | ||||
| Fundación | Desde que le cambiaron el nombre a Edo | ||||
| Población | Mucho mas que Espiña | ||||
| Gentilicio | Otaku | ||||
| Alcalde | Hayao Miyazaki | ||||
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Tokio (东京 Tōkyō, "Nueva York 3026"; oficial de Kyoto (东京都 Kyoto-shi), es una de las 47 prefecturas de Japón, Tokio es la capital de Japón, el centro del área metropolitana de Tokio, y es propenso a varios ataques de monstruos cada año. Su población se compone principalmente de chinos que emigraron al este y una especie no corporal de Aliant que tratan de apoderarse de su cuerpo al ser absorbido por las fosas nasales.
Los habitantes de Tokio prefieren mecanismos complejos de trabajo y son a menudo atacados por los robots y chamanes que forman grandes grupos en los centros comerciales y en letrinas de cajas de cereal Quaker. Es común que los habitantes de Tokio comunicarse de manera no verbal durante el día con una serie de dispositivos digitales incrustados en su órganos genitales a la vez. Los principales productos de exportación de Tokio incluyen baseball, ninjas y el ocasional roboto.
Esta ciudad, que se parece tanto a una lata de sardinas gigante de alta tecnología es la capital de Japón, sin embargo, no es la cuna de la civilización japonesa (si es que se puede hablar de civilización entre los asiáticos): de hecho, Tokio se convirtió en la capital de Japón tan pronto ocurrieron los eventos de mayo del 68.
Tokio se encuentra en Japón, especialmente en la isla de Honshu que es la más grande de Japón. Se encuentra bien lejos de Nagasaki o la Isla de Shuikoku, y está lo suficientemente lejano de Hokkaido.
Es aún más la distancia que hay entre Tokyo y las demás ciudades como Kyushu, Roppongi o Hiroshima, de lo que es. Pero rápidamente se hace evidente que no está muy lejos del mar tampoco.
El Shogun de Tokio (Shogun que significa "Gran maestro Pokémon"), que se caracteriza por ser alcaldes en los países civilizados, dirige Tokio bajo la ley marcial desde 1265 (antes de que existieran realmente, pero volverán). Son elegidos, hasta que son asesinados por la mafia local, lo que garantiza la estabilidad democrática tokiota.
El Shogun se coloca bajo la autoridad suprema del emperador de Japón, aunque tradicionalmente, todo el mundo prefiere evitar a este último mientras dirige el país supuestamente. La realidad es que el Shogun respeta profundamente la voluntad del emperador, pero igualmente de profunda es su devoción que..., a la mierda, él hace lo que quiere.
Los habitantes de Tokio se llaman Yakuzas. No obstante, no está bien visto que se los llame cuando portan algunos tatuajes de dragones japoneses y/o andan vestidos con un esmoquin: la tradición es una primera prueba de cumplimiento con la población local, y evita el retorno, pieza por pieza.
Por otra parte, la población de Tokio se compone principalmente de samurais, ninjas, partiendo por lo de las geishas y los frikis. Sin embargo, los ninjas ya no están, como en la década de 1970, vestidos con mallas azules y armados con shurikens: los ciudadanos de Tokio que pasan 20 horas al día en el trabajo, no pueden darse el lujo de usar estas ropas tradicionales, que ahora sirven como pijamas.
Tokio también tiene muchas prostitutas. Sin embargo, tenga en cuenta que esta actividad económica no es muy dinámica en la capital. Muchos factores entran en juego: en primer lugar, el 80% de las prostitutas son, en realidad (y después de una revisión a fondo) hombres. Sin embargo, los clientes de tal servicio también son hombres, no hay muchos clientes (sí, usted no puede hacerse el espabilado e ir a las prostitutas, vamos a ser lógicos!). Por otra parte, una explicación razonable para la falta de clientes parece ser que las prostitutas tratan de verse extravagantes bastante peculiares, que pueden sorprender a los turistas o incluso darles asco y terror (bueno, tal vez no sea los turistas chinos, que comen los huevos fertilizados de todos modos!). Tenga en cuenta que no hay que confundir a las geishas (que son sólo las mujeres jóvenes de buena educación, aunque enmascaradas con pinturas de plomo) con las prostitutas (que son las hijas de la mala educación y el maquillaje con una paleta).
La historia de la ciudad comienza con un país no identificado, aislado en medio de una naturaleza hostil. A la llegada de una gente salvaje que viene de Hokkaido (en New Jersey ): Los Ainu que llegaron a Japón alrededor del sexto milenio antes de nuestro Jesucristo no maldijera a nosotros.
Los Ainu, una versión peluda, inculta y japonesa del ciudadano común homosexual estándar, procedían de Ucrania, que fueron desalojados a causa de los pendejos de Mongolia. Así que tuvieron que caminar a través de toda Asia a pie. Una vez que llegaron a Japón, se toparon con un río agradable para sumergir sus pies y perforar sus ampollas.
Se preguntaron por qué tenían que recorre un largo camino, habiendo tenido el buen sentido de detener su avance, siempre inútil. Es en las orillas de este río se detuvieron y se decidió construir el primer rascacielos en lo que se convertiría en la ciudad de Edo.
Cerca del 12 de enero a las 8:03 de 554 a.C (las fuentes son demasiado escasas para establecer una cronología más precisa), Japón se vio afectada por el modelo de Samurai. Así que después de un salto rápido en las tiendas de moda prêt-à-porter, muchos ainus se convirtieron en samurais. Todos ellos cumplen un código específico, el Bushido (incluidas las normas principales que son: no hay patada en los testículos, la prohibición formal para albergar una espada en el orificio anal del oponente, ser superiores en moda, y siempre comer papas fritas con su salsa de Samurai).
Fue en 1492, cuando los estadounidenses descubrieron la Isla, un rico ciudadano Ainu naturalizado japonés decidió construir un castillo. Temía que los estadounidenses, al no haber inventado la crema de cacahuate y diezmar a los aztecas, los incas, los apaches, hurones, los maoríes y los noruegos, hicieran lo mismo con los japoneses. Este castillo, que no se construyó en Kyoto, capital imperial, sin embargo. Y por una buena razón, ya que el mercado de vivienda se mantiene como una chispa encendida (literalmente y figurativamente).
El castillo fue construido a continuación, junto al río sin interés que hemos hablado anteriormente. Fue nombrado el castillo de Edo, en homenaje a esa agua sucia de edad (es decir, Estuarío, que reduce el número de la basura).
Así nació la ciudad de Edo, una ciudad cuyos habitantes nunca habían tenido ni mierda, ni sabían leer o escribir, ya que no existían aún.
En 1603, el Shogun Kitombalo Yamamoto, decide hacer una gran ciudad militar en los vestigios de la antigua Edo, inspirado en los grandes ejércitos occidentales, en especial el ejemplo del ejército de los Estados Unidos. Lo que antes se parecía a un pueblo en unos días se convertirá en el mayor cuartel militar del mundo: en la Bahía de Edo no se encontraban portaaviones (por desgracia, el avión aún no existía, pero la idea era innovadora para su época), y 4000 motos de agua equipadas con misiles guiados de primera generación (de hecho, el misil fue lanzado con la mano por los militares, cuya cabeza estaba en busca de un objetivo).
Los tanques se han creado alrededor de la llanura de Kanto (bueno, los tanques de madera, siguen siendo eficaces incluso si los llamas que los empujaron murieron rápidamente). Toda la población de Japón se concentró en Edo de las órdenes del Shogun, vaciando de repente la población de Kyoto, y el resto también. Pues bien, debido a la falta de gente, un gran incendio destruyó por completo Edo, y por lo tanto, el arsenal militar. Pero al final, lo importante es participar.
Japón esta demográficamente desiqulibrado, y Edo se había convertido en una verdadera lata de sardinas para los seres humanos alienados en el trabajo (aunque muchos de ellos tenían el pelo quemado por el fuego), llegó la idea de que Edo fuera la nueva capital de Japón.
En 1868 (después de mayo del 68, recuerde la restauración imperial que masacró a muchos obreros socialistas y bolcheviques malévolos), Edo se convirtió en Tokio (según el Protocolo de Kyoto, el nombre de la ciudad debía poseer un valor de más de 10 puntos en el Scrabble), que sustituyó al de Kioto como la capital de Japón. Este repentino cambio fue un poderoso símbolo de la transición de la antigua cultura shogunal conservadora con la cultura de los jóvenes inadaptados rebeldes: te darás cuenta en el hecho de que Tokio no es sino una jerga de la palabra de Kyoto! en idioma joven, que querían tomar el poder y se negaron al ritmo del metro, el trabajo, Kyoto, decidieron elegir una ciudad más cercana al Océano Pacífico (el océano de los hippies), y querían darle un nombre fresco.
No fue sino hasta 1933 que los jóvenes japoneses sesenta y eighters, llegan a una edad adulta, decidieron que era más consistente, su edad, para ser conservadores u ultra-nacionalistas. El emperador Enrique Hito, que se había trasladado a Kioto con una deslocalización de empresas Breton, decidió que era hora de Tokio, Japón y el resto de las prefecturas, para dominar toda Asia, que incluyó Rusia, Senegal y las islas Seychelles. Por desgracia, una pelota llegó justo a la otra punta: mientras que el general Mojo salió en un avión para pasar unas vacaciones en Hawai, presionó el botón equivocado, confundiendo el botón de disparo con el de la caída de anclaje. Devastando los barcos estadounidenses en Pearl Harbor, causando odio entre todos los estadounidenses.
Consecuencia de Pearl Harbor, los EE.UU. enviaron a Ben Affleck, quien se apresuró a combatir el fuego y la espada del imperio japonés con mierda. Para poner fin al conflicto en el Pacífico, pero sobre todo para armar los efectos especiales necesarios, Ben Affleck quería enviar dos bombas grandes a Tokio, pero su disparo, atacó con armas nucleares Hiroshima y Nagasaki en su lugar. Inmediatamente, Japón se rindió (incluso si planearon en secreto el plan de invasión para conseguir la venganza). Tokio se llena de turistas.
Con la reconstrucción, los japoneses decidieron hacer de Tokio una ciudad fuera de lo normal. Como es actualmente, por desgracia, es cierto que llegaron allí, no hay duda. Ahora bien, esta es una gran ciudad llena de ratas amarillas que no pasan del 1,60mts que les gusta vestir de cualquier manera que, que se ven absorbidos por un porte arquitectónico increíble (la ciudad, no los japoneses!). Todo lo que es la tecnología de baños, que son incomprensibles para cualquier occidental (en la reflexión, sólo los japoneses pueden entender cómo funcionan).
Una pequeña nota es proporcionar a los lectores que deseen viajar a Tokio: en efecto, un choque emocional comprensible que podría afectar a los individuos que no están preparados para los tipos de animales presentes en la capital japonesa. En primer lugar, los animales no son japoneses sino importados por mercantiles indonesios, a los que se les han achinado los ojos. Esto puede parecer sorprendente a primera vista: Dicho esto, lo hizo muy rápidamente para notarlo. Por desgracia, esto no son todos los animales que viven en la mayor decadencia de Tokio.
La junta dio al sabio de los turistas, sobre todo de no llevar a sus compañeros caninos o felinos en Tokio! Ellos pueden quedar contaminados por el comportamiento de los animales japoneses, que podrían transformarlos en un estado que no quiere escuchar ningún amante de los animales (excepto, quizás, un zoófilico o japonés). Las mascotas, están muy atraídas por la moda en Tokio, no dude en usar ropa especialmente ridícula. En particular su interés es la moda que prevalecerá entre los gatos, y los artículos de Hello Kitty. La mayoría de los gatos son fans del fenómeno felino japonés, que los hace ver igual de ridículos que sus amos.
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