De: La Frikipedia, la enciclopedia extremadamente seria. De: La Frikipedia, la enciclopedia extremadamente seria.
Son sustancias químicas características por ser adictivas. Se esconden, principalmente, en utensilios de cocina o limpieza para poder ser vendidas en antros y zulos como el Mercadona, el Carrefour y sitos del estilo. Los principales tipos son:
Es el de más baja categoría. Desoxidante de mala calidad unido con una publicidad penosa. Es la básica caca que sabe mal y te deja resaca para dos o tres semanas. Es altamente corrosivo y se utiliza también como matarratas.
Invento revolucionario que ha conseguido acercarnos un poco menos al futuro. Surgió por la necesidad de lavar monedas, quitar al típico aceite de coche del suelo y el techo de la cocina y las corridas del jersey de tu madre. Su novedoso envase con spray ha revolucionado el mundo de la alta costura y quebrado las compañías de spray de pintura. Lo que muy poca gente sabe es que además es un perfecto repelente para hormigas.
Más conocido como Ácido Desoxidante Nuclear, ácido sulfúrico o calimocho. Está en todas las células de todos lo seres humanos, lo que demuestra claramente que todos se lo han metido vía intravenosa. Fue descubierto por los rusos cuando mezclaron Coca-Cola, vino y Cillit Bang y se lo metieron por el culo.
Éste es más utilizado como arma química que como droga, pero siempre hay ricos que se permiten el lujo. La policía norteamericana (que no es tonta, tal y como nos intentan hacer creer sus propias series) descubrió el engaño y detuvo a un pirata chungo por llevarla encima (más bien debajo, pero bueno…). Por esto, en Estados Unidos está prohibido usar detergente que no sea esterilizado por los muy eficientes científicos norteamaricones.
Pasta azul con una composición sospechosamente similar al dentífrico. Siendo la primera no-espuma de afeitar específica para el vello púbico público de los huevos, causó furor entre las amas de casa y los Teletubbies. Pero todo es una tapadera: es una especie de champú tipo Herbal Esencies que da placer a todo aquel que se lo restriega por la cabeza. Así que ya sabéis que hacer.
En efecto, esto no es broma y el pegamento desoxida. Puedes hacer la pueba: métete una moneda de dos leros por el culo, empujándola con una barra de pegamento. Intenta no cagar en dos días y luego te la sacas. Límpiale la mierda y verás cómo está nuevecita. Conozco a gente que lo ha hecho y no lo recomienda, pero esto es para comprobar un hecho científico, y como dijo una vez el profeta George W. Bush, “El saber no ocupa lugar en la chola, pero sí en el culo”.
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