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El Calientaburras, también conocido con el nombre de "calfaburres" por su herencia Valenciano-Polaca, fue inventado por un grupo de científicos valencianos que no conseguían encontrar novia. Desde su primera utilización en una discoteca, este invento ha sido modificado con el paso del tiempo hasta el punto de haber varios supuestos inventores como Papuchi o Rappel. No obstante desde la 4 guerra civil española se conoce su receta y se vende en farmacias bajo el permiso de un médico o chamán reputado (no reputeado).
La fabricación primitiva del famoso calientaburras se consigue mediante algunos componentes básicos capaces de ser conseguidos con contrabando, como lo son las aspirinas Bayer, la coca-cola, los caramelos de menta o los afrodisíacos para camellas, éste último más fácil de conseguir. Existen varias formas básicas para crear un calfaburras, estos ejemplos van del más leve al más brutal:
El calfaburres es un afrodisiaco y como tal su objetivo es calentar al sujeto que ha ingerido dicha sustancia, haciendo que piense guarrearías sadomasoquistas con todo el mundo que le rodea y haciendo que sus partes más genitales expiren líquidos muy viscosos para la mayoría de los terrícolas. Los efectos inmediatos son el endurecimiento de los mugrones (o tetillas) y la gordura del miembro masculino y femenino. Según la secta de la salud europea, la no realización de guarrerías y/o conductas puteriles conlleva la muerte inmediata del sujeto 1d6+1 horas después de la ingesta.
El calfaburres no se receta a ancianos con poca posibilidad de mojar a pesar de los efectos en los demás. Tampoco se recomiendo el uso sobre mujeres de libido desenfrenada por haber grandes posibilidades incluidas de provocar el efecto contrario al deseado.
El calfaburres suele provocar en el 45% de los casos algunos efectos secundarios.
El calientaburras es un brebaje que suelen fabricar las abuelas en los mercados medievales de los pueblos. No obstante, este producto fue comercializado por industrias Bayer y se vende en las farmacias por lo que cualquier persona puede adquirirlas siempre y cuando no le pidan receta médica. Así que cualquier persona que no tenga algunos problemas específicos y que vaya a un médico a pedirle receta para el calfaburras, éste se lo dará sin contratiempos.
Según algunos antropólogos reputados, el calfaburres podría haber sido inventado por algún fricky primitivo de alguna religión ancestral. En algunos escritos sobre la mitología Egipcio-semita aparecen algunos dioses y leyendas populares relacionadas con el calfaburres y la primera elaboración. Se dice que el dios Baco fabricó el primer calfaburres y se lo dio a los frikis mesopotamicos para que consiguieran atraer a las burras en celo que pastaban por las ricas praderas de Afganistán.
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